



Martín y Omar, siempre creciendo juntos hijo y padre, una armonía del vivir humano, en el vínculo familiar espiritual.
su carácter tan alegre, festivo, plástico, ingenioso, genera una mayor ternura, subiendo al estrado a recibir su diploma secundario, ante el aplauso de todos y el mío.
La imagen,toda mi alegría, expandida teatralmente, que otra cosa !!! Es inolvidable. Una alegrìa esperada y merecida.
Con sus compañeros, haciendo algo que le es propio, la sociabilidad.
De màs pequeños biològicamente, intentando unir puentes de lealtad incondicional.
Adelante hijo querido. por otros desafíos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
holiss, agradezco tus comentarios